MIÉRCOLES 13 DE MAYO DE 2020
Esta mañana me he levantado temprano y tras desayunar y leer el periódico he decidido hacer una nueva excursión, antes de que empiece a llover y me entre esa pereza que nos entra a los que somos de lugares donde llueve poco; los ingleses salen pertrechados de paraguas e impermeables y si llueve se mojan y si no, pues tan contentos.
A las ocho he salido camino de las lagunas endorreicas de Utrera, que están al sur de esta preciosa localidad sevillana de más de 53.000 habitantes a unos 20 km de mi casa. Utrera es uno de esos lugares cuyo nombre se te fija en la memoria para siempre, antes de saber que era una ciudad, gracias al ejército de vendedores ambulantes que iban con sus cajas por los trenes de media Andalucía pregonando "¡Al rico mostachón de Utrera!". El mostachón es un pequeño bizcocho redondo y aplanado que se hace en horno sobre papel y se vende en paquetes de docena atados con la típica cuerda vegetal que se usa para atar la envoltura de las bandejas de pasteles en los establecimientos acreditados. El nombre deriva del latín hispánico "mostaceum" (bizcocho redondo) y lo hacían las monjas clarisas , pero en 1880 uno de sus panaderos José Romero Vázquez montó un negocio por su cuenta que todavía dura en manos de sus tataranietos bajo la marca Diego Vázquez, que a mi nuera le encantan. Luego también tuve de secretaria a Chari Vázquez, una utrerana de raza , y a la que debo una visita.
Utrera se desarrolla mucho en el siglo XIX gracias al ferrocarril y a empresarios muy emprendedores como Enrique de la Cuadra, un indiano que ganó muchísimo dinero y lo invirtió en su ciudad haciendo de todo, desde un magnífico teatro a la italiana donde se representaba y se representa ópera tras la magnífica restauración dirigida por Juan Ruesga en los años 90, hasta la reconstrucción para su domicilio del palacio de los condes de Vistahermosa donde le hicieron varios salones espectaculares: el chino, el pompeyano, el alemás y el salón árabe, una mezcla entre los Reales Alcázares de Sevilla y el palacio de Buckingham, que son visitables y este último, sobre todo, ha salido en varias películas; ahora es la sede del ayuntamiento.
Hice gran parte del camino por la Cañada Real que atraviesa Dos Hermanas y que se conserva bien, con el ancho reducido, hasta muy cerca de Utrera, viendo al paso bastantes conejos y numerosos Milanos negros(Milvus migrans)y busardos ratoneros(Buteo buteo), seguramente por la cercanía al vertedero cercano a la estación de Don Rodrigo. La Cañada conecta con una urbanización "alegal" y desde allí por carretera hasta El Palmar de Troya, lugar famoso por unas apariciones místicas de la Virgen María a unos niños a partir de 1968, por cierto que casualmente hoy es el día de la Virgen de Fátima y sus apariciones.
Esta aldea utrerana, que conquistó después su independencia municipal, era en esa época noticia continua en los periódicos de Sevilla donde yo estudiaba Ciencias Biológicas. Hoy hay una gigantesca basílica que es la sede de la "Iglesia cristiana palmariana de los carmelitas de la Santa Faz" escisión de la Iglesia católica de la que fue primer papa con el nombre de Gregorio XVII, el contable ecijano Clemente Domínguez famoso por dispendios y que prueban que la fe mueve los bolsillos de mucha gente de todo el mundo que permiten mantener semejante edificio y curia que no tiene nada que envidiar a la del Vaticano. Yo como socialista tengo el honor de estar excomulgado, como el papa San Juan Pablo II o el rey Felipe V, mientras que Clemente ya es santo como Francisco Franco o Carrero Blanco.
La foto de la Basílica es de hoy y mañana entraré a contar mi visita a las lagunas, mientras, se ha hecho de noche y llueve.
Esta aldea utrerana, que conquistó después su independencia municipal, era en esa época noticia continua en los periódicos de Sevilla donde yo estudiaba Ciencias Biológicas. Hoy hay una gigantesca basílica que es la sede de la "Iglesia cristiana palmariana de los carmelitas de la Santa Faz" escisión de la Iglesia católica de la que fue primer papa con el nombre de Gregorio XVII, el contable ecijano Clemente Domínguez famoso por dispendios y que prueban que la fe mueve los bolsillos de mucha gente de todo el mundo que permiten mantener semejante edificio y curia que no tiene nada que envidiar a la del Vaticano. Yo como socialista tengo el honor de estar excomulgado, como el papa San Juan Pablo II o el rey Felipe V, mientras que Clemente ya es santo como Francisco Franco o Carrero Blanco.
La foto de la Basílica es de hoy y mañana entraré a contar mi visita a las lagunas, mientras, se ha hecho de noche y llueve.
