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miércoles, 28 de septiembre de 2022

RTVE, EL FINAL DE LA UTOPÍA

 


Sí, ayer con la dimisión de José Manuel Pérez Tornero de la presidencia de RTVE,  se confirmó que creer que en la España actual era posible articular un proceso consensuado entre los partidos políticos para que los españoles tuviéramos la Radiotelevisión pública fuerte e independiente que necesitamos, era una utopía y por tanto algo irrealizable. Los que conocemos algo del mundo mediático, sabíamos de la enormidad de la tarea, prácticamente imposible, de transformar nuestra vieja y cansada nave de la RTVE en la radiotelevisión que necesitamos los ciudadanos, con información independiente, educativa y cultural y con entretenimiento para todos los públicos, todo ello imprescindible para compensar, si quiera parcialmente, desde lo público el  masivo y disparatado entorno mediático privado en el que vivimos y proteger algo nuestra siempre frágil democracia. Sí, a finales de febrero de 2021, fui un ingenuo  al creer que  esta utopía era posible, porque si los políticos se habían puesto de acuerdo, al fin,   y al timón iba a estar al profesor Pérez Tornero es porque esta vez iban a tomárselo en serio, conocían su proyecto e iban a dotarlo de los medios necesarios.

Paco Lobatón, sin sombra de resentimiento pese a no haber sido elegido para formar parte del Consejo de la RTVE, reconocía, en un artículo publicado el 1 de marzo de 2021 en La Voz del Sur, ”el grandísimo acierto de que en el juego de carambolas de la negociación entre los partidos, la presidencia fuera para Tornero”, del que fue alumno de Semiótica, y añadía que “Es probable que la semiótica le ayude a relativizar los discursos de alguno de los consejeros emisarios con los que tendrá que bregar, pero es seguro que sabrá embridarlos con su talante  sereno y un punto oriental, y con su indudable capacidad para construir discursos incluyentes y proyectos, que trasciendan las minucias partidistas y empiecen a tener la hechura de estrategia, así lo evidenció de manera elocuente su comparecencia en la Comisión del Congreso” y terminaba el artículo diciendo: ”Es una utopía necesaria aspirar a una RTVE revitalizada, capaz de ser el necesario contrapunto frente a la opulenta oferta de las privadas y de las plataformas de pago. Una RTVE que emerja como sólido referente en contenidos de calidad y credibilidad informativa, en un panorama audiovisual más competitivo que nunca y como nunca mercantilizado”.

Si alguien era capaz de  esa tarea titánica era el profesor Pérez Tornero , un académico bien formado y comprometido con la Educomunicación , que goza de un prestigio internacional en su materia  apabullante, progresista independiente y con una capacidad de escuchar y consensuar que siempre me han parecido insuperables. Lo he visto en congresos y reuniones, sentado al final de sesiones masivas con vivas discusiones anotando cosas y sin decir nada  y cuando al final la mesa parecía incapaz de llegar a conclusiones operativas, levantarse y sin ninguna altivez hacer una propuesta sensata que era aceptada por todos. Si, es verdad que lo considero mi maestro, porque de él he aprendido mucho, pero también porque cuando lo he necesitado para alguno de mis proyectos profesionales ha estado conmigo y me ha ayudado de forma discreta y desinteresada, como cuando trataba de armar un proyecto de programa educativo para Canal Sur  como el Club de las Ideas, cuyo nombre fue idea suya.

Ya sé que el consenso político  que necesitamos para los asuntos importantes es un deseo cada vez  más difícil. No hay más que ver el cerrilismo de la derecha oponiéndose a los nombramientos del ámbito jurídico, incumpliendo la Constitución, pero lo que más me duele es que los políticos que han frustrado  esta nueva ocasión de crear la RTV pública que necesitamos han sido  “los progresistas”, seguramente agobiados por las expectativas electorales son incapaces de  preservar  la independencia de los servicios públicos y así nos va. No puedo entender que desde la izquierda se destruya esta ocasión a cambio de un trozo del pastel, al grito de “para eso hemos ganado las elecciones”.
 Ya sé que la derecha tiene demasiados medios a su servicio, pero una RTVE dividida entre los partidos no es la solución, desde la izquierda se debería luchar por la independencia de los medios públicos, pero está claro que ahora ya no es posible, por eso ante la imposibilidad de  llevar a cabo su proyecto por la oposición de la mayoría del Consejo, demasiados “consejeros emisarios”, la dimisión de Pérez Tornero era obligatoria, que otros  hagan el reparto por partidos. Algunos no necesitan de la política para vivir, bienvenido.