Powered By Blogger

jueves, 28 de marzo de 2024

LONDRES 6: COCHES, COCHES Y RETRATOS

 







Está mañana del jueves 28 de marzo amaneció con nubes y claros y decidimos echarnos a la calle a ver gente, que luego en la Antilla estamos muy solos casi todo el año. Los empleados de los concesionarios de Bentley, Aston-Martin, Ferrari y Koenigsegg son muy amables y pese a la lluvia hemos podido entrar, preguntar y fotografiar sin cortapisas, son autos que no me parecen cómodos y carísimos para mí que no suelo desear  lo que no puedo tener, aunque para mí nieto forman parte de lo posible.
Reconozco que Koenigsegg es una marca sueca que desconocía, la tienda era la más lejana pues estaba por Kensington a más de 5 km y pensábamos ir paseando disfrutando  del fresquito mientras hacíamos paradas, pero a la altura del Fortnum & Masson original en  el 181 de Picadilly Street, llovía a mares y hacia  un viento frío molesto, así que entramos empujando sus puertas de madera, para no comprar nada y eso que te entran ganas pues sobre todos son cosas ricas de comer, pero lamentablemente a Eduardo no le gusta el chocolate ni el caviar.
Seguimos  el paseo en un claro pero al rato nos subimos a un autobús rojo de dos plantas de la línea 9 y luego otro 9 para la vuelta  pero ya hasta Trafalgar Square para visitar la Cripta de Saint-Martin-in-the-fields, que para mí en su sencillez es la parte más bonita de la iglesia que en su conjunto tiene ese pesado estilo neoclásico georgiano tan del gusto inglés y copiado al infinito en sus colonias, aunque en la versión de madera me resulta más agradable. Hace 35 años se bajaba por la modesta escalera original y ahora por una mucho más cómoda  que nace en un templete anexo infumable para facilitar el acceso a lo que es un gran negocio de hostelería, pues ofrece comer de forma aceptable sobre lápidas, eso  sí para mantener obras benéficas. En realidad estábamos allí para que el nieto cumpliera el deseo  su madre de calcar un grabado de metal en un papel y que impedí  a su madre pues en aquel viaje éramos 5 y teníamos prisa.  El milagro  es que todavía lo tienen como atracción y su hijo es hábil como  ella y sabe inglés suficiente para entender las explicaciones.
Comimos luego exquisito solomillo de ternera con patatas a la puerta de la National Portrait Gallery, dónde después subimos a la tercera planta a comprobar que Catalina de Castilla era guapa y elegante, mucho más que la media de las Tudor que la rodean.  
De allí al hotel es un paseo que hicimos pasar por Chinatown , completando los 12 km andados del día. Aunque estamos en Semana Santa mañana para  nosotros vendrá  el Mesías en todo su esplendor.