LUNES 1 DE JUNIO DE 2020
Las familias, los amigos, los vecinos y los próximos hemos estado unidos como nunca durante toda esta etapa especial de nuestras vidas. Cada uno en nuestro estilo hemos tratado de ayudar a los demás y hemos recibido ayuda de mucha gente, no sólo material sino espiritual, ¿quién no ha recibido una llamada de aliento de alguien silente hacía años?.
Con las excepciones que tratamos de olvidar, todo nuestros entorno en el más amplio sentido de la palabra ha estado a la altura, aunque estuviera a miles de kilómetros de distancia, para manifestarnos su apoyo, sobre todo a los que hemos sufrido un duro golpe sin consuelo posible y menos cuando no hemos podido ni abrazar a quienes queremos.
¿Todos?, todos no, mientras el gobierno recién nombrado se afanaba en afrontar lo nunca visto, desde el más amplio desconocimiento, con la ayuda de científicos y técnicos de todo tipo, la oposición política, casi sin excepción, siguiendo estrictamente el manual de la estrategia de la crispación, se ha dedicado a hostigarlo con el objetivo de derribarlo, en vez de apoyarlo en un momento tan crítico, no por el bien del gobierno sino por el bien de los ciudadanos que pagamos sus sueldos, llegando al colmo de haber abierto denuncias en los juzgados. La suerte para todos es que el gobierno desde su debilidad no se ha hundido y mejor que peor ha hecho su tarea y posiblemente en vez de desgastarse puede haber salido reforzado ante ataques tan miserables como los sufridos estoicamente por Salvador Illa y Fernando Simón, que han representado muy bien a los millones de españoles capaces de apretar los labios y no responder a las provocaciones en aras del bien común.
Los crispadores pensaban seguir en la misma línea en esta segunda fase de recuperación de la normalidad e incluso habían empezado a instrumentalizar para su causa de "cuanto peor, mejor" a la Comisión para la Reconstrucción Social y Económica que se constituyó el 7 de mayo, es decir 46 diputados reuniéndose para seguir insultándose, pero parece que el aire ha cambiado y Patxi López, presidente de la Comisión aprovechando un ridículo enfrentamiento creo que ha conseguido establecer el clima de respeto que deben mantener si es que los políticos quieren recuperar un poco del aprecio perdido.
No es la hora de censurar al gobierno, tarea que desde mi punto de vista nos corresponde a los ciudadanos con nuestro voto en las próximas elecciones, salvo que haya una mayoría alternativa capaz de ganar un moción de censura que es la única manera democrática de quitar a un gobierno entre dos periodos electorales, lo otro huele mal, a conspiración de poderosos.
Pues bien, esa Comisión para la Recostrucción, además de oir a las organizaciones sociales relevantes, está abierta de verdad a estudiar propuestas y sugerencias que hagan los ciudadanos y para ello ha creado un buzón : comisionRSE@congreso.es al que cada uno de nosotros podemos enviar las nuestras, porque en palabras del Grupo Parlamentario Socialista: "La Comisión debe estar abierta a todas las voces de la sociedad civil que quieran aportar su granito de arena a la tarea común de reconstruir los daños de la crisis con el objetivo compartido de que nadie se quede atrás. De esta crisis debemos salir fuertes y unidos, y escuchando siempre lo que la sociedad nos tenga que proponer"
Yo, que ya he comprobado que el buzón funciona y responde, voy a enviar varias que tengo en mente y todos deberíamos hacerlo para contribuir a la solución, porque cuando hay un problema, y el que tenemos es muy grave, "los inteligentes buscan soluciones y los inútiles, culpables".
