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viernes, 19 de enero de 2024

SOY PRAGMÁTICO Y APOYO AL PRESIDENTE SÁNCHEZ.




Ser pragmático, realista o práctico está devaluado en el uso que hacemos de nuestra lengua, incluso la academia considera que su antónimo es ser idealista que goza de mucho mayor predicamento. Equivocadamente se asimila el idealista al altruista, noble, filántrópico y desinteresado en vez de al ensoñador o iluso y así nos va, dejándonos arrastrar por líderes supuestamente idealistas, llenos de ideas que bien llevadas a la prácticas serían muy útiles para nuestro bien, pero que no actúan de verdad a nuestro favor, por eso yo prefiero a los que gestionan con pragmatismo nuestros asuntos públicos y no a los que se pierden en sus atractivas ideas que nunca se llevan a la práctica.

Siempre he sido pragmático para todas las cosas de la vida y desde niño aprendí a distinguir los sueños de la realidad y gracias a ello me he llevado muy pocas decepciones. Cuando estudiaba bachillerato descubrí que me gustaba estudiar algunas cosas, pero que en general prefería no estudiar, como mi familia estaban muy encima de nosotros y sacar aprobado era considerado un fracaso, encontré una solución de compromiso para que me dejaran tranquilo y fue estudiar lo necesario para sacar notable, lo que me dejaba mucho tiempo libre para corretear a mi aire. Nunca he necesitado ser el primero, me bastaba con llegar.

Al iniciar en la juventud actividades políticas claro que fui revolucionario y muy dogmático pero superé esa etapa muy pronto gracias a tener más espíritu crítico que utópico, lo que me hizo ver enseguida que para cambiar la realidad las buenas ideas son necesarias pero no bastan, y que la bondad de los líderes es de agradecer pero la historia nos demuestra que en general no garantiza unos buenos resultados, y sobre todo que la falta de libertades y el sometimiento al mandato de cualquier fe, que justifique el mal para conseguir un bien... siempre futuro, deriva en horrores terribles que deben evitarse siempre, sin excusa ni pretexto. Por eso he sido y soy socialdemócrata, a sabiendas de que es una ideología que puede parecer endeble a los que buscan soluciones claras y definitivas a los problemas de la humanidad, cueste lo que cueste.

El PSOE es uno de los partidos socialdemócratas más antiguos de Europa y salvo pocas excepciones ha sido pragmático y gracias a ello ha impulsado como nadie la mejora en las condiciones de vida de los españoles sin cuestionar la democracia y la alternancia política, Ya sé que los socialdemócratas suecos para evitar males mayores fueron neutrales con el nazismo y que decir de los daneses que siguieron gobernando en la ocupación nazi de su país, mientras que en el Reino Unido formaron parte del gobierno de Winston Churchill para luchar contra Hitler, o como Felipe González(donde digo, digo, digo Diego) que valientemente nos metió en la OTAN contra la voluntad mayoritaria de la izquierda española o Pedro Sánchez en los pactos "imposibles" que le han permitido mantener un gobierno que actúa en beneficio de la mayoría, demostrando en todos los casos el pragmatismo político de los socialdemócratas que sin abandonar sus ideas han actuado con cintura y sin dogmatismos para democráticamente hacer avanzar a las sociedades donde gobiernan.

Me gusta oír a Pedro Sánchez en Davos defender, en inglés, la socialdemocracia como la mejor palanca para garantizar prosperidad económica, aumentando el bienestar y la igualdad de todos en un mundo que parece haberse vuelto loco pues en vez de luchar por la paz y la prosperidad, los países fuertes que deberían liderar un nuevo mundo más justo apoyan la continuidad de guerras sin fin por todos lados. Esto me da esperanza en un futuro mejor para todos pues no puede haber libertad sin igualdad y sin solidaridad y todo lo demás son discursos vacíos y ampulosos por muy progresistas que se tilden. Si alguien tiene dudas de que la derecha está armándose para mantener sus privilegios solo tiene que oír el discurso , en español, de Milei en el mismo foro, defendiendo sin pudor que el mercado es la única ley para nuestro progreso y que el estado es un estorbo para la verdadera libertad, como si se pudiera ser libre sin igualdad y todo ello inteligentemente disfrazado de neoclasicismo económico ortodoxo para retrotraernos cien años y además argumentándolo demagógicamente mejor que sus compinches: Trump, Bolsonaro, IDA o Abascal, que básicamente se apoyan en el miedo a la incertidumbre que se encargan de promover.

Si, Pedro Sánchez es un pragmático y por eso lo apoyo.



15 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy de acuerdo

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo, Juan María. No tiene por qué ser peyorativo el pragmatismo. Peor es, pienso, mantener posturas de una ortodoxia imposible que llevan a la decepción de los ciudadanos.
P. Valdivia

Anónimo dijo...

Totalmente de Acuerdo.
Volví al Seno del Partido,
Cuando vi a un LIDER, que
No tenía ni pizca de Egolatra
Su personalidad Pragmática
Cercana y empatica.
Esta ganándose a pulso a muchos " Idealistas" de Salón.

Jose Manuel Cervera Gragera dijo...

Totalmente de acuerdo!

Loles dijo...

Muy de acuerdo! Me gusta el estilo moderado que tienes

Juan María Casado dijo...

Gracias por comentar. De acuerdo

Juan María Casado dijo...

Gracias

Juan María Casado dijo...

Gracias

Juan María Casado dijo...

Gracias

Ángel Fernández Millán dijo...

Pragmatismo es realismo. Acertado análisis.

Juan María Casado dijo...

Gracias, querido Ángel

Anónimo dijo...

Qué buena reflexión, Juan María!

Juan María Casado dijo...

Muchas gracias

Anónimo dijo...

Cuidado con llamar " loco" a Milei, que no lo haces. En todo caso unirle, además, otro calificativo, "peligroso". Y sigamos lo que pasará en Argentina en las próximas fechas por si tenemos que poner las barbas en remojo.

Juan María Casado dijo...

Gracias por tu comentario. Estoy en profundo desacuerdo con él, pues es una nueva versión de Margaret Tatcher que tanto daño hizo, pero los locos somos los que nos creemos a este tipo de profetas