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viernes, 15 de noviembre de 2024

DEL RIO DADÉS AL ERG CHEBBI





 La sexta jornada empezó pronto porque el dolor de la cadera  me dió la noche, sobre todo porque impedía mi postura favorita, Como no estaba dispuesto  a rendirme, tras el desayuno me llegué a una farmacia y compré comprimidos  de 600 mg de Ibuprofeno que a la dosis recomendada no es que te quite el dolor es que no lo sientes.  
Unos 360 kilómetros separan Ouzarzate de Merzouga  por buenas carreteras atravesando el valle del Dadés, rio  que nace en el Anti Atlas en los neveros de sus cumbres de cuatro mil metros y que se suma  al Draa,  el río más largo de Marruecos, hace frontera con Argelia y tras desaparecer cientos de kilómetros  desemboca en el Atlántico.
El valle está  vivo gracias  al  turismo, el agua, la agricultura y la producción  de energía eléctrica  termosolar y fotovoltaica. Me llena de esperanza la presencia continua de escolares, ellas y ellos, de todas las edades, bien vestidos y equipados en las travesías de las poblaciones y contrasta con las de muchas mujeres veladas.
Nos hemos desviado para ver la garganta del  Dadés que merece la pena con paredes  de piedra de gran belleza.  Cerca de nuestro destino observamos los respiraderos de varias khetaras: túneles de varios kilómetros que con una ligera pendiente llevan agua de los acuíferos hasta las poblaciones de este pre-desierto desde hace muchos siglos, aunque ya hay pocas en uso.
Cerca de Merzouga está nuestro alojamiento al pie del ERG CHEBBI, un mar de dunas que mañana visitaremos.
Llevamos recorridos  casi dos mil kilómetros  y hemos llegado al extremo  más al sur y al oeste de este viaje y nos quedan otros tantos para volver sin repetir casi ningún trayecto, pues tan importantes como los destinos son los caminos.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Vuestro viaje es impresionante y espero que esa cadera se recupere . Cuídate 😘😘😘

Mariela López Garzòn dijo...

Comparto tú frase " tan importante son los caminos como los destinos" disfrútalo.

Anónimo dijo...

Buenos recuerdos de las gargantas del Dades y el Todras, así como las dunas de Merzuga y acueductos subterráneos de su entorno.
Allí localicé especies típicas de murciélagos como Asedia trident, muy típico en ese entorno.
Gracias J.Maria. Buen viaje.

Juan María Casado dijo...

Gracias, ya va mucho mejor

Juan María Casado dijo...

Gracias. Un abrazo, querida amiga.

Juan María Casado dijo...

Muchas gracias, querido Pedro. Marruecos es apasionante

casadca dijo...

Cuida ese dolor de cadera y muy buena recurrir idea el Ibuprofeno
Que bonito relato de este valle del Dadés de su garganta y de las Khetaras con sus túneles
Muy interesante y bien contado
Bon continuation du voyage et bonne recuperation