Tendría que escribir artículos
razonados sobre las cosas que están pasando en nuestro mundo, pero no tengo cuerpo para ello pues llevo casi
una semana enfermo. Primero pensé que era COVID porque personas con las que he
tenido contacto estrecho lo han cogido estos días, pero tras dos test de
antígenos concluí que era un resfriado
de los antiguos de esos que te pegan los nietos, tienes tos, te duele
todo el cuerpo y durante dos días me ha
tenido con fiebre de más de 38 ºC, pero, como escribir tengo que escribir
porque necesito echar fuera lo que la fiebre ha cocido en mi interior me lanzo
sin paracaídas y que sea lo que dios
quiera.
El mundo está revuelto con
conflictos que nos afectan ya, y que nos afectarán gravemente en el futuro
porque todo lo que sucede en cualquier lugar del mundo nos afecta, suceda en
Ucrania con su guerra en ciernes, que puede seguir siendo fría o calentarse
hasta quemarnos; en Yemen con su guerra silenciada pero que mata seres humanos
o el eterno drama palestino o saharui en medio de nuestro atronador silencio;
en Taiwan con su soledad frente al gigante chino que amenaza continuamente las
libertades de los taiwaneses como ya acabaron con las libertades en Hong Kong.
O suceda más cerca de nosotros como en Nerva con su vertedero, que si sí, que
si no, como si no fuera necesario que haya este tipo de instalaciones, que se
encarguen del tratamiento controlado de los peligrosos residuos tóxicos de la
actividad humana en el primer mundo,
pero que nadie quiere en la puerta de su casa; o por entrar en política, política, pongamos
que hablamos de… Castilla y León con sus elecciones recién celebradas que
pueden dar lugar a la normalización política de Vox, la sección española de la
ultraderecha mundial nacida y criada para acabar con nuestras libertades, el
antiguo fascismo hoy disfrazado de defensor de las libertades curiosamente
fomentado a partes iguales por el republicanismo trumpista y el putinismo
unidos en el odio al modo de vida europeo mucho más atractivo que los modelos
que ellos promueven.
Me asquea profundamente y me horroriza, porque no quiero vivir gobernado
como si fuéramos una nación dividida en dos mitades artificiales, una de derechas
condicionada por la ultraderecha liberticida y otra de izquierdas sustentada por los nacionalismos, localismos y
secesionismos de todo tipo y condición, que objetivamente son profundamente
reaccionarios y retrógrados, porque al final esa división no sólo será política
sino que se infiltrará en la sociedad haciéndola invivible, sobre todo para los
que queremos avanzar primero hacia un gobierno europeo y finalmente a un único
gobierno mundial, democrático, por supuesto.
Si, soy partidario de un
acuerdo político razonable entre los
partidos que han hecho posible el período mejor de nuestra historia, la derecha
tradicional del PP y la izquierda socialdemócrata del PSOE que ponga freno a la
ultraderecha y también a los partidos secesionistas, mal llamados nacionalistas
y, como éramos pocos, parió la abuela, ahora se le van sumando los partidos
provinciales que crecerán en las
próximas elecciones, incluso nuevos partidos comarcales en las provincias muy
pobladas. Esto debería solucionarse de una vez con algún tipo de acuerdo entre
PSOE y PP para facilitar el gobierno del que fuera la primera fuerza política y
evitarnos el circo de gobiernos con fuerzas minoritarias surgidas al calor de
oportunismos locales o nacionalistas que condicionan hasta el hartazgo las
políticas que necesitamos. En Huelva ya
está en marcha el partido Por Huelva en busca de los 13.500 votos necesarios
para obtener un escaño y supongo que distintas iniciativas estarán en marcha
por toda Andalucía para aupar a algún aspirante
a político ya sea por comarcas, por localidades o por actividad, que
todo es posible. En Andalucía que es realmente un sistema de ciudades
consolidado con una cierta independencia no costaría mucho trabajo exacerbar
los agravios comparativos que permitieran sustentar o dar pretexto a
candidaturas localistas. No costaría mucho trabajo convencer a los jerezanos
del maltrato que reciben de Cádiz o que
decir del Campo de Gibraltar o de Guadix, o Motril ,o Linares, o Priego, Écija,
Antequera, El Ejido, Marbella o Dos Hermanas
que son ciudades vivas y llenas
de problemas, esperando que algún oportunista, para crear su candidatura, los
catalogue de agravios con las capitales
provinciales y dar al final una composición parlamentaria con 20 partidos
locales y donde tanto PP como PSOE no subieran del 25% de los votos. No es
política ficción, es una proyección razonable de lo que estamos viendo venir y
que puede acabar con nuestro sistema político.
4 comentarios:
Yo creo que haces un análisis muy realista y certero, no puedo estar más de acuerdo contigo. Al final Soria ya y otros muchos que saldrán no dejan de ser nacionalistas de otro tipo y a mi el nacionalismo del tipo que sea me parece profundamente reaccionario.
Gracias por tu juicio. Hay que parar el disparate de los localismos ahora que todavía entre PP y PSOE suman más del 50% . Luego será imposible.
Se perdió la ideología hace años; lo cual explica que se confunda la libertad con la ingesta de cerveza. También que se vote por sentirse maltratados por los partidos tradicionales, pero me pregunto: ¿Tienen éstos alguna culpa del nacimiento de esos grupos de supuestos/realmente maltratados? Crearé, para las municipales un partido que se llame "Bami ya existe"; vótalo.
Los fascimso nacen porque los políticos progresistas hacen mal su tarea. Y no atienden las demandas justas de las clases medias que se sienten maltratadas frente a la facilidad con la que los pobres y los diferentes obtienen ventajas de los progresistas porque dan prioridad a hacer lo justo. Hay que hacer lo justo y seducir a las clases medias, pero esto da para otro artículo. Bami como Fuenteheridos no da para un diputado pero Montequinto si..
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